Qué esperar de los precios de energía y CO2

La semana pasada tuve el gusto de participar en el Spanish Energy Day organizado por Montel. Y digo que fue un gusto porque para mí fue una oportunidad estupenda de aprender del resto de los ponentes, expertos en mercados energéticos internacionales, acerca de la evolución de los precios en estos mercados, y de las dinámicas subyacentes. Representantes de empresas como Pöyry, Alpiq, ICIS, Acousmatics, SendeCO2 o Antuko nos dieron su visión sobre los precios futuros del gas, del carbón, del petróleo, del CO2, y de la electricidad.

Lo que me resultó más interesante fue la conversación acerca de los precios del gas, uno de los determinantes no sólo de los precios de la electricidad en muchos mercados (como el español), sino también clave para entender el precio del CO2 o incluso las dinámicas de descarbonización (por ejemplo, por su efecto sobre la rentabilidad de las plantas de carbón, como estamos viendo estas semanas en España). Los distintos expertos coincidieron en que hay ahora mismo en el mercado mucho, muchísimo gas (proveniente de EEUU y Rusia, fundamentalmente), que los almacenamientos están hasta arriba, y que en estas condiciones parece que los precios se mantendrán bajos una temporada larga (salvo, claro, que la meteorología nos dé una sorpresa y tengamos un final del otoño frío, o que la demanda de Asia repunte). Sin embargo, también apuntaron a que esta tendencia debería cambiar cuando deje de aumentar la capacidad de licuefacción en EEUU, algo que podría suceder en 2021.

Como decía antes, esto es muy relevante para las estrategias de descarbonización. Si el precio del gas sigue barato durante bastante tiempo sí podría tener sentido cerrar las plantas de carbón, al menos en España, aunque también dependerá de lo que hagan los precios del  CO2  (que, en pura lógica, deberían bajar al bajar el precio del gas, porque se reduciría la demanda de permisos). Eso sí, si baja el precio del gas también baja el precio del mercado mayorista de electricidad, y con él la rentabilidad de las plantas renovables…A largo plazo, el panorama es más complicado, como nos recuerda Nick Butler.

Sobre el petróleo, el consenso es que parece difícil que suba de los 80$, dado que hay mucho shale oil muy elástico al precio. Y el carbón….en principio debería bajar, por el abandono de las centrales eléctricas en muchos países, pero quizá repunte en la década próxima por la demand ade asia. En los tres casos, una variable muy importante es China: si su economía crece más o menos de lo previsto, estos mercados lo notan mucho.

También me pareció muy interesante la reflexión sobre el mercado europeo del CO2, el ETS. Un mercado en el que todos los fundamentales (demanda de permisos, a su vez relacionada con la actividad económica o los precios del switching de gas por carbón) deberían apuntar a una tendencia bajista…y que sin embargo ha experimentado una subida espectacular, quizá dirigida más por las expectativas a largo plazo asociadas a la estrategia europea de descarbonización 2050. Habrá que ver si las expectativas se imponen a los fundamentales o no.

En la última presentación que pude escuchar se habló de que los próximos años serán interesante para gran parte de la nuclear francesa, que tendrá que pasar por su revisión decenal para superar los 40 años de vida, y seguramente las inspecciones lleven más tiempo de lo esperado, al menos a la vista de lo que ha sucedido en los años anteriores. Y esto, claro, tendrá sus consecuencias sobre la oferta y los precios de electricidad en Europa….

En resumen, un evento muy, muy interesante, sobre todo para los académicos que no seguimos tanto el día a día de los mercados.

NOTA: Mi presentación fue la más light de todas, porque me tocó hablar de cómo veo el panorama político respecto a la energía…parecía una crónica rosa frente al resto de ponencias :). Si alguien quiere escuchar alguna de las reflexiones, Richard Sverrisson y Andrés Cala me entrevistaron para el Montel Weekly Podcast.

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